No solo es importante incorporar las hidrataciones para tu cabello en tu rutina de belleza, sino que, también, es necesario saber cuál es el tipo de mascarilla capilar ideal para tu tipo de pelo.
Cabello encrespado: necesita hidrataciones más profundas ya que es, naturalmente, más seco. En este tipo de cabello se deben evitar las coloraciones para no dañarlo. Lo ideal es adquirir productos compuestos a base de óleos capilares humectantes.
Cabello lacio: una mascarilla reequilibrante es la más recomendada para esta textura. Ya de por sí, cuenta con niveles más altos de hidratación. Para este tipo de pelo, lo mejor es buscar productos con ingredientes hidratantes ligeros. Lo ideal es no aplicarlos cerca de la raíz para no darle un aspecto pesado al pelo.
Cabellos ondulados y rizados: tienden a resecarse y, por esa razón, se recomienda hidratarlos con productos compuestos a base de aceite. Es un cabello con una textura más irregular y el frizz es uno de sus grandes problemas. Este se puede erradicar aplicando los productos hidratantes más cerca de la raíz, pero evitando acercarse al cuero cabelludo. Para dejar las mechas bien definidas, lo mejor es utilizar productos modeladores.
Por otro lado, todas las cremas, mascarillas, etc. que contengan ceramidas como ingredientes, ayudan a reparar el cabello seco y poroso. Finalmente, al momento de aplicar los productos en cualquier tipo de cabello, hay que dividir las mechas en secciones para ir colocando un poco en cada una y que se absorba mejor.
